La agencia
Associated Press publica nuevos testimonios sobre el supuesto abuso de poder
del tenor español en producciones en Estados Unidos. Ahora con más
declaraciones a la prensa de once mujeres y ninguna acusación formal quizás
porque el estatuto de limitaciones para este delito ha expirado. Las
acusaciones todas suceden en USA y no hay ninguna en Europa, un elemento a
tener en cuenta. Probado o no, creíble o no, la reputación del consagrado tenor
se va al piso. El elemento de estar en una posición de poder sea por prestigio,
liderazgo y/o dinero es de un peso suficiente como para crear lo que se llamar
en derecho ¨el margen de duda en el individuo común¨. El propio Placido dijo en
su declaración inicial que el baremo para medir estas cuestiones era otro
entonces. O sea que un pellizco en una nalga, una frase con intención lasciva,
un tocamiento sin permiso, una mirada fija e impúdica a un escote pronunciado,
etc. eran bien recibidos o simplemente tolerados con resignación porque una
demanda no iba a tener lugar. Con ello, no niega que haya sucedido sino que
admite la posibilidad como un estándar de conducta hace 20 años atrás. Y luego
están las opiniones como las de la famosa carta de Catherine Denueve, dejando
el terreno abierto a quien pudiera haber provocado o aceptado una situación más
por trepar que por miedo. Y por supuesto, aunque el predominio mayoritario de
estos incidentes tienen a las mujeres como víctimas, hay también casos de gays
y de hombres heterosexuales La
controversia seguirá pero las pregunta que deberíamos hacernos son: En
cualquier circunstancia y sea quien sea ¿Caben estas situaciones en lo que debe
ser una estricta relación laboral basada en el respeto mutuo? ¿Tiene algún derecho alguien en posición de
poder para atentar contra la dignidad y la integridad moral de la persona?
El acoso
psicológico u hostigamiento, ese trato vejatorio y descalificador hacia una
persona, ha sido objeto de amplios
estudio psicológicos. Y todos, de un modo u otro, coinciden en dos aspectos:
Que cuando el acoso es progresivo produce incertidumbre y pérdida de autoestima
en la victima y, que la persona acosada no suele ser plenamente consciente de
ser vulnerada, por lo que no confronta al acosador.
Y no siempre
tiene que tener trasfondo sexual. Fue el premio Nobel de Medicina Konrad Lorenz
quien mencionó el término ¨mobbing¨ en
1973: Descrito en el ámbito laboral, es la comunicación hostil y desprovista de
ética que es administrada de manera sistemática por uno o unos pocos
individuos, principalmente contra una única persona, quien, a consecuencia de
esto, es lanzada a una situación de soledad e indefensión prolongada. Lo
curioso es que el término deriva de la observación del investigador de un tipo
de conducta principalmente agresiva entre las algunas especies de animales como
ciertos pájaros contra sus adversarios.
Las mujeres
en sí, los homosexuales, las mujeres embarazadas, y los jóvenes son los blancos del mobbing más
recurrentes. Las consecuencias para el acosado pasan por miedo y baja autoestima
hasta auto marginación e ideación suicida.
Visto lo
visto, parece que algunos humanos se comportan como los pájaros, con picos
largos pero no tienen alas.
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